Como se imaginarán en nuestra casa abundan los regalos para el Día del Padre. Este año no fue la excepción. Pero los mensajes de las tarjetas van madurando y este año, me gustó el de una marimbera. No es nada excepcional pero me encantó su espontaneidad.

Lo reproduzco ahora, aunque de forma anónima porque la autora no estaba dispuesta a revelar su identidad. ;o)

Querido papito: 


¡Gracias!


Por estar siempre que te necesite y enseñarme con tu ejemplo lo que es el esfuerzo y el trabajo, por preocuparte cuando me enfermo, por hablar conmigo de lo que sea, por entenderme, por tu cariño y los buenos momentos. 


Hoy quiero darte este presente por ser como eres. El mejor padre del mundo.


Suspiré profundo cuando la leí. Snif, snif.

Soy mamá de seis hijos y directora editorial de Niu. Me confieso como lectora empedernida y genéticamente despistada. Escribo para cerrar mi círculo vital.